MODA: ¡HECHO EN EL RESTREPO!
𝖢𝖺𝗅𝗓𝖺𝖽𝗈, 𝖬𝖺𝗋𝗋𝗈𝗊𝗎𝗂𝗇𝖾𝗋í𝖺, 𝖠𝗋𝗍í𝖼𝗎𝗅𝗈𝗌 𝖾𝗇 𝖢𝗎𝖾𝗋𝗈 𝗒 𝖠𝖿𝗂𝗇𝖾𝗌, 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝗍𝗈𝖽𝖺 𝗅𝖺 𝖿𝖺𝗆𝗂𝗅𝗂𝖺, 𝖾𝗇 𝖾𝗅 𝖻𝖺𝗋𝗋𝗂𝗈 𝖽𝖾 𝗅𝗈𝗌 𝗓𝖺𝗉𝖺𝗍𝖾𝗋𝗈𝗌.
El que un cliente satisfecho jalona a otro, no pasará de moda. Más, cuando se trata de calzado, ropa y lo relacionado con prendas de vestir, en el que el barrio Restrepo, durante más de 60 años, ha sido líder, sin importar la época y las altas y bajas de la economía.
El barrio de los zapateros de Bogotá, viene dejando huellas. Lamentablemente, el apoyo de los gobiernos: local, distrital y nacional, ha sido lánguido. El peso lo han llevado los empresarios: zapateros, peleteros, textileros y confeccionistas, quienes le dan identidad al sistema moda, que es sinónimo de generación de mano de obra, de empleo… de ocupación, lo cual debería ser premiado, por el compromiso que tienen con el desarrollo económico.
“El desarrollo empresarial de la Localidad de Antonio Nariño, liderada por los barrios Restrepo y el Policarpa, donde están concentrados los puntos de venta de materiales, fabricantes de calzado y comercializadores; los textileros y confeccionistas, respectivamente, no morirá, porque los micros, pequeños y medianos empresarios tenemos el compromiso de contribuir al bienestar de la gente”, dicen quienes invierten en la zapatería y las confecciones.
El proyecto ¡Hecho en el Restrepo!, que próximamente abrirá sus puertas, dará de qué hablar. Será un punto de encuentro empresarial, en el que los consumidores podrán comprar el mejor calzado, lo mismo que marroquinería, artículos en cuero, ropa y tapabocas, entre otros elementos, que son esenciales para la gente.
“Vamos a continuar demostrando que el barrio Restrepo es el sector más poderoso en producción de zapatos, vestuario y afines. Ahora, también con productos que se volvieron obligatorios, por la pandemia”, expresan quienes están convencidos de que invertir en el Restrepo es una excelente decisión. ¡Hecho en el Restrepo! es una marca que trasciende desde hace varios años, que comenzaron a imponer el Periódico El Peletero y Ansecalz, en el Distrito.
Es bueno recordar que Hecho en Bucaramanga nació por iniciativa de Wilson Gamboa, jerarca de Asoinducals-Santander, que se extendió a nivel país, para darle más identidad a lo que se fabrica en las regiones, no solo del sistema moda, también otros productos.
El sello con el amarillo, azul y rojo de Hecho en Bucaramanga, Hecho en el Restrepo y Hecho en Colombia, no podrá faltar en ninguna prenda… en ningún artículo, para diferenciarlos de los productos chinos que pululan en las calles y muchas veces los compradores creen que son colombianos.
La marca ¡Hecho en el Restrepo! y Hecho en Colombia, evitará engaños… que al consumidor le metan gato por liebre: le vendan zapatos y ropa extranjeros, de pésima calidad, a precios irrisorios, sin garantía.
Moda: Hecho en el Restrepo es calidad y diseño. Calzado, bolsos, carteras y cinturones, en puro cuero. Punto de Encuentro Empresarial La Valvanera, el lugar ideal para comprar lo que las personas necesitan para darle comodidad a los pies y elegancia a sus cuerpos.
Este es el primer paso de varios proyectos que tienen los empresarios para que el barrio de los zapateros sea visitado a diario por turistas, nacionales e internacionales. Quienes recorren el Centro Comercial de Cielos Abiertos del Restrepo no se van con las manos vacías… compran calzado, lucen las últimas tendencias.
Además, porque los precios de puntos de fábrica permiten que la familia estrene calzado y ropa. ¡Hecho en el Restrepo! conquista cada vez más clientes de todas las edades, lo cual contribuye a la reactivación económica, que tendrá que ir siempre en línea ascendente, para evitar que los industriales del calzado, vestuario, tapabocas y elementos de bioseguridad, cierren sus plantas de producción y se vean obligados a despedir colaboradores… operarios.
El Periódico El Peletero y Ansecalz y Afines apoyan incondicionalmente las iniciativas que conlleven al rescate empresarial, que no podrá ser más teoría. Los empresarios del calzado y ropa, en su mayoría, no quieren que los continúen utilizando con programas como Inversión Local, que no se ve reflejado en los pequeños productores de calzado, que subsisten por su capacidad de trabajo y tendencias, mientras que los operadores hacen su fiesta aprovechando la ingenuidad de unos pocos, quienes le dicen sí a todo, causándole un enorme perjuicio al sector del sistema moda.
La Localidad de Antonio Nariño, la más productiva de Bogotá, es la que menos recursos recibe para desarrollo económico. Al Distrito le importa un pepino si crecen o no los zapateros y confeccionistas.
Reina la politiquería. Les venden ilusiones… mandan los contratistas y quienes creen que se las saben todas. ¡Qué vergüenza!