Por: Lo Veo Todo
Analista del Periódico El Peletero
El primer año de mandato de Iván Duque Márquez, no ha sido lo que se esperaba. Quienes le dieron el voto de confianza estaban convencidos de que el joven presidente pondría a marchar el país en un dos por tres, que sacaría de la incertidumbre a 48 millones de colombianos que pusieron en él una esperanza de cambio, que por ahora no se ve, por el contrario se agudiza.
Colombia no soporta más buenas intenciones. Es ‘se hace o nos llevó el que nos trajo’. La gente quiere que se trabaje sobre lo construido, que se deje a un lado la polarización y entre a gestionar lo que realmente necesita la Nación: mucha paz y más desarrollo económico y social. El pueblo está cansado de tanta intriga política, de tanto rifirrafe entre quienes rodean al jefe de Estado, que tiene buenos planteamientos, pero no ha podido consolidarlos, de ahí la baja calificación que le dan el sector empresarial y las personas de a pie.
La andanada de impuestos se convirtió en un rechazo de la gestión de Duque Márquez. Bienvenidos los impuestos, es una obligación tributar, pero estos no se sienten cuando se trata de retornarlos en beneficios, porque ¿qué beneficio se le está dando a quienes promueven la industria y el comercio? Ninguno. Es pague, y cómo se paga si la productividad se vino a menos, pocos están dispuestos a sacrificar sus capitales, a crear y a fortalecer sus empresas, por miedo a que los impuestos se los ‘traguen’ vivos. El ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla, el cerebro de la tributación, piensa en mucho pedir y en poco dar, situación que lo tiene como uno de los miembros del gobierno Duque más impopulares.
El aspecto económico, lo es todo. Donde existen oportunidades de crecimiento industrial, educación y salud, que se traducen en una excelente calidad de vida, no hay tiempo para pensar en el mal, en dedicarse a cosas diferentes a las de vivir de la mejor forma. Para eso nos dio Dios la oportunidad de estar de turistas en esta tierra. Presidente Duque, en sus manos y en las de su equipo de colaboradores está nuestro bienestar. Gobierne a su estilo, muchas veces quienes nos rodean nos hacen meter la pata.
Comments