ZONAS AZULES Y ESPACIO PÚBLICO: ¡PESADILLAS
El cobro de parqueo en vía minimizaría la presencia de los consumidores en el barrio de los zapateros
LA PRESENCIA de funcionarios de la Secretaría de Movilidad, del Terminal de Transporte y de la Policía, en sectores claves del Centro Comercial Cielos Abiertos del Barrio Restrepo, tiene en alerta a los industriales y comercializadores del calzado y al comercio en general, porque, además de que el espacio público está invadido, les quieren instalar Zonas Azules en lugares claves en los que las ventas de insumos para calzado (peleterías), al igual que de zapatos terminados, tienen como compradores a clientes entre un 85-90 por ciento, que vienen 5 o 10 minutos por materias primas en sus vehículos, adquieren lo que necesitan y se marchan.
Con las Zonas Azules, esta clase de compradores no volverá. Esto atenta, según los inversionistas, contra el comercio organizado, situación que debe ser analizada y concertada; de lo contrario, será una tijera para los comerciantes. El tema de las Zonas Azules data de más de 30 años, y ahora las quieren imponer, sin ninguna garantía; el operador no responderá por daños y robos, simplemente colocará cepos y cobrará.
La administración de la alcaldesa Claudia López quiere dejar firmado el contrato, pero el comercio organizado se opone. Que haya Zonas Azules en sectores residenciales, mas no en los comerciales, dicen los comerciantes del Restrepo, y menos a pocos días de que comience la temporada navideña.
La solución, a largo plazo, es la construcción de un Gran Parqueadero Público-Privado. Mientras tanto, no queremos Zonas Azules, expresan los comerciantes, quienes además tienen la pesadilla de la invasión del espacio público, que es ocupado por vendedores ambulantes que distribuyen productos similares a los de ellos, que sí pagan impuestos, lo cual es una competencia desleal. Nos quieren llevar a la pobreza y no lo vamos a permitir, defenderemos nuestros derechos, señalan los fabricantes y comercializadores de zapatos, quienes son los verdaderos imanes para que la gente venga y adquiera muchas cosas más… en el Restrepo lo encuentran todo.
Las Zonas Azules, además, ponen en riesgo la estabilidad laboral de 45 cuidadores de Asovicar y de 35 de CoproNorte, quienes se han convertido en los verdaderos vigilantes del comercio del Restrepo.
Algo similar pasa en La Alquería y Suba, donde los comerciantes han puesto el grito en el cielo; las Zonas Azules no benefician a nadie. En el exterior, son normales, pero aquí no hay cultura para tal fin, es más bien un negocio.